Gene Clark. Vuela hacia el sol

GENE CLARK. VUELA HACIA EL SOL. Álvaro Alonso.
Lenoir Ediciones.  2018. 234 páginas.


Uno de los atractivos de la creciente oferta de libros musicales es que son tan variados como la propia música. Hay libros que se leen con la cadencia de un blues y otros que te arrastran como una oleada de free-jazz; los hay enciclopédicos y los hay monográficos; unos son crónicas distantes y otros están escritos desde dentro de la historia; algunos se quieren objetivos y otros no disimulan su subjetividad. Y en concreto el libro de Álvaro Alonso es un asombroso ejercicio de arqueología, que desentierra al completo a un músico que falleció hace tres décadas y nos lo hace presente con todo lujo de detalles, una reconstrucción histórica de un actor secundario del escenario de la costa Oeste que nos permite conocer las causas por las que este artista genial, poseído por el don de dar vida a excepcionales canciones, no obtuvo el reconocimiento que merecía. Alonso describe la lucha de egos en The Byrds, las trampas y el desdén de McGuinn y Crosby hacia el chico de Missouri, su paso por la banda que abandonó tras los primeros éxitos y a la que regresó ocasionalmente cuando le necesitaron; pero también el carácter descontrolado y autodestructivo de Clark, ese punto rebelde de su sangre india que le llevó más de una vez a tirarlo todo por la borda. Todo esto nos lo cuenta basándose en testimonios muy próximos, de su propia familia y de amigos con los que creó su música, porque Alonso cruzó América durante un año con su grabadora en el bolsillo, visitando a las gentes y recalando en los lugares de la vida de Clark. Con precisión milimétrica y una abundancia de datos que exige una lectura reposada y sin prisas, este libro documenta la tragedia de un músico que, como apunta el autor, vivió para componer, tocar y cantar, sin preocuparse del éxito, que igual actuaba ante miles de personas o en un bar a cambio de las consumiciones, que nunca buscó los motivos de lo que hacía. Alonso, que es doctor en filosofía, podía haber caído en el error de filosofar sobre Gene Clark, pero como es sabio no lo hace sino que nos pone ante la realidad y deja que seamos nosotros los que veamos el alma de su personaje.